"Al parecer, la Constitución se opondría a que pague más el que más se beneficia. Entonces, habrá que plantearse cambios constitucionales", adelantó el presidente uruguayo en su tradicional audición de radio semanal en la FM M24.
José Mujica reclamó que "los gobiernos pueden subir aranceles, subir el IVA a los consumidores, tasas, etcétera, pero no pueden gravar la concentración de la tierra".
"Parece moralmente defendible que quienes con mucha tierra, más de dos mil hectáreas, quienes han recibido un beneficio tan grande hagan un aporte de 10, 12, hasta 16 dólares por hectárea, por año. ¿Por qué? Porque recibieron un beneficio cuyo origen es en gran medida la marcha de la sociedad. Yo estoy hablando no de legalidad, sino de moralidad. Si esto es moralmente defendible, legalmente vamos a acatar lo que hay que acatar", señaló el mandatario.
El presidente uruguayo explicó que esa recaudación podría contribuir a urbanizar todas las comunicaciones en los caminos uruguayos. “Porque se trata de una necesidad de carácter histórico y es por ello moralmente defendible".
"Esta batalla por cambios profundos en la ruralidad va a continuar. Hay que tener claro que no vamos a bajar los brazos, no vamos a cambiar el programa, seguiremos luchando con toda nuestra fuerza y con los que nos puedan entender", advirtió.
José Mujica reclamó que "los gobiernos pueden subir aranceles, subir el IVA a los consumidores, tasas, etcétera, pero no pueden gravar la concentración de la tierra".
"Parece moralmente defendible que quienes con mucha tierra, más de dos mil hectáreas, quienes han recibido un beneficio tan grande hagan un aporte de 10, 12, hasta 16 dólares por hectárea, por año. ¿Por qué? Porque recibieron un beneficio cuyo origen es en gran medida la marcha de la sociedad. Yo estoy hablando no de legalidad, sino de moralidad. Si esto es moralmente defendible, legalmente vamos a acatar lo que hay que acatar", señaló el mandatario.
El presidente uruguayo explicó que esa recaudación podría contribuir a urbanizar todas las comunicaciones en los caminos uruguayos. “Porque se trata de una necesidad de carácter histórico y es por ello moralmente defendible".
"Esta batalla por cambios profundos en la ruralidad va a continuar. Hay que tener claro que no vamos a bajar los brazos, no vamos a cambiar el programa, seguiremos luchando con toda nuestra fuerza y con los que nos puedan entender", advirtió.