En Río de Janeiro, la capital turística del país, cientos de miles de personas se echaron a la calle para bailar, beber y divertirse con los “blocos”, comparsas que en esta época del año recorren todos los rincones de la ciudad con música y disfraces.
El Cordo da Bola Preta, la más grande de estas agrupaciones, colapsó la céntrica avenida Río Branco con un gentío que sus organizadores aspiraban llegar a los 2,5 millones de personas, para que se le reconozca como la mayor comparsa de carnaval del mundo por el Libro Guinness de los Récords.
Según la secretaría de Turismo de Río, 1,8 millones de personas asistieron al evento, 500.000 menos que el año pasado.
Todo tipo de fetiches, como pitufos, piratas, superhéroes, personajes de cuentos infantiles, vikingos, cavernícolas, bailarinas árabes, bomberos, enfermeras, policías o ángeles se mezclaron entre la desinhibida muchedumbre que desbordó la avenida Río Branco y se desparramó por calles aledañas.
“El carnaval de Río solo comienza cuando el Bola Preta va para la avenida. El Bola es institución de Río y nos sentimos muy honrados de eso”, dijo el presidente de la comparsa, Pedro Ernesto, antes del inicio del multitudinario desfile.Más temprano, en el barrio de Santa Teresa, otra multitud con todo tipo de disfraces se juntó a los músicos del “bloco” Ceu na Terra, que recorrió las empinadas calles del sector.
Cordo da Bola Preta y Ceu na Terra son dos de las 492 comparsas autorizadas por la Alcaldía de Río para presentarse durante los días del carnaval, cuyo cenit dura desde anoche hasta hoy con el desfile de la escuelas de samba en Río de Janeiro. Se prevé una asistencia de 72.500 personas en el sambódromo Marqués de Sapucaí.
Asimismo, multitudes se tomaron las calles de ciudades del nordeste del país, como Salvador, Recife y Olinda, cuyos carnavales compiten en popularidad con el de Río.
El Cordo da Bola Preta, la más grande de estas agrupaciones, colapsó la céntrica avenida Río Branco con un gentío que sus organizadores aspiraban llegar a los 2,5 millones de personas, para que se le reconozca como la mayor comparsa de carnaval del mundo por el Libro Guinness de los Récords.
Según la secretaría de Turismo de Río, 1,8 millones de personas asistieron al evento, 500.000 menos que el año pasado.
Todo tipo de fetiches, como pitufos, piratas, superhéroes, personajes de cuentos infantiles, vikingos, cavernícolas, bailarinas árabes, bomberos, enfermeras, policías o ángeles se mezclaron entre la desinhibida muchedumbre que desbordó la avenida Río Branco y se desparramó por calles aledañas.
“El carnaval de Río solo comienza cuando el Bola Preta va para la avenida. El Bola es institución de Río y nos sentimos muy honrados de eso”, dijo el presidente de la comparsa, Pedro Ernesto, antes del inicio del multitudinario desfile.Más temprano, en el barrio de Santa Teresa, otra multitud con todo tipo de disfraces se juntó a los músicos del “bloco” Ceu na Terra, que recorrió las empinadas calles del sector.
Cordo da Bola Preta y Ceu na Terra son dos de las 492 comparsas autorizadas por la Alcaldía de Río para presentarse durante los días del carnaval, cuyo cenit dura desde anoche hasta hoy con el desfile de la escuelas de samba en Río de Janeiro. Se prevé una asistencia de 72.500 personas en el sambódromo Marqués de Sapucaí.
Asimismo, multitudes se tomaron las calles de ciudades del nordeste del país, como Salvador, Recife y Olinda, cuyos carnavales compiten en popularidad con el de Río.
En Salvador, capital del estado de Bahía, la fiesta comenzó el pasado jueves con los tríos eléctricos, camiones dotados con potentes parlantes sobre los que se presentaron diversas orquestas que recorrieron sin parar dos circuitos creados especialmente para el carnaval. Esa tierra pródiga de cantantes y compositores se rindió la noche del pasado viernes al empalagoso Gangnam Style del surcoreano PSY, que se presentó en la tarima de la intérprete carioca Claudia Leite.
Emocionado con la experiencia, PSY publicó el pasado sábado un mensaje en su Twitter en el que decía que nunca olvidará “esa energía de la samba”. Recife, capital de Pernambuco, dio rienda suelta a la fiesta con el desfile del Galo da Madrugada, una comparsa presidida por un gallo gigantesco detrás del cual se amontonaron cerca de 2,5 millones de personas al ritmo del frevo y otros ritmos de la región.
También en Sao Paulo, la capital financiera del país, el carnaval paralizó las actividades y las miradas se volvieron hacia el sambódromo de Anhembi, donde el pasado viernes comenzaron los desfiles de las escuelas de samba de la ciudad.
Entre los personajes del espectáculo que visitan Brasil para participar de sus carnavales constan los actores estadounidenses Megan Fox y Brian Austin Green. Y el cineasta estadounidense Spike Lee grabó entrevistas y escenas de su nuevo documental Go, Brazil go.
Fuente: AFP/EFE
Emocionado con la experiencia, PSY publicó el pasado sábado un mensaje en su Twitter en el que decía que nunca olvidará “esa energía de la samba”. Recife, capital de Pernambuco, dio rienda suelta a la fiesta con el desfile del Galo da Madrugada, una comparsa presidida por un gallo gigantesco detrás del cual se amontonaron cerca de 2,5 millones de personas al ritmo del frevo y otros ritmos de la región.
También en Sao Paulo, la capital financiera del país, el carnaval paralizó las actividades y las miradas se volvieron hacia el sambódromo de Anhembi, donde el pasado viernes comenzaron los desfiles de las escuelas de samba de la ciudad.
Entre los personajes del espectáculo que visitan Brasil para participar de sus carnavales constan los actores estadounidenses Megan Fox y Brian Austin Green. Y el cineasta estadounidense Spike Lee grabó entrevistas y escenas de su nuevo documental Go, Brazil go.
Fuente: AFP/EFE