La Unión Europea (UE) amenazó con imponer nuevas sanciones a Rusia ante el deterioro de la seguridad y la situación humana en el este de Ucrania, mientras que Rusia calificó al ejército ucraniano de "legión extranjera de la OTAN".
Los ministros de Asuntos Exteriores de la UE celebrarán el 29 de enero un consejo extraordinario para abordar la situación en Ucrania, tras el ataque con artillería en la ciudad ucraniana de Mariupol el pasado sábado, en el que murieron 30 personas y hubo un centenar de heridos.
"En vista del empeoramiento de la situación", señalaron los líderes de los Veintiocho en una declaración conjunta, "le pedimos al próximo consejo de Asuntos Exteriores que evalúe la situación y considere medidas adecuadas, en particular, acerca de nuevas medidas restrictivas dirigidas a la aplicación rápida y completa de los acuerdos de Minsk".
El primer ministro y ex presidente ruso, Dmitri Medvedev, advirtió que "en caso de este tipo de decisiones, me gustaría nuestra respuesta económica será sin restricciones". El presidente ruso, Vladimir Putin, aún no se ha pronunciado.
En tanto, la Rada Suprema (Parlamento) de Ucrania declaró hoy a Rusia "Estado agresor" en un documento aprobado en una sesión extraordinaria del cuerpo, con los votos de 271 de los 298 diputados presentes en la sala, acelerando el pulso del conflicto armado en esa ex república soviética.
El texto afirmó que Rusia "respalda el terrorismo y bloquea la labor del Consejo de Seguridad de la OTAN, con lo que pone en peligro la seguridad y la paz internacional".
En su declaración, los legisladores de Kiev hicieron además un llamamiento a los Parlamentos de otros países y a organizaciones internacionales a que también declaren a Rusia país agresor, a quién denuncian de estar implicada en el conflicto armado en el este del país.
El presidente ruso, Vladimir Putin, caracterizó ayer al ejército ucraniano de ser una "legión extranjera de la OTAN" cuyo objetivo es contener a Rusia, y advirtió que muchos ucranianos "intentan huir" a Rusia para no ser "usados como carne de cañón", en declaraciones en la universidad de San Petersburgo.
Las afirmaciones de Putin fueron simultáneas a otras de similar calibre de su ministro de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, que acusó al gobierno de Kiev de "torpedear" el proceso de paz y de optar por una solución militar para el ya prolongado conflicto en el este de Ucrania.
El comunicado de los Veintiocho añade que están "preparados para tomar medidas adicionales si fuera necesario" y reiteró su preocupación por el deterioro de la seguridad en el este de Ucrania.
"Observamos evidencia de apoyo continuo y creciente dado a los separatistas por parte de Rusia, lo que subraya la responsabilidad de Rusia. Instamos a Rusia a condenar las acciones de los separatistas y aplicar los acuerdos de Minsk", subraya el comunicado difundido por la agencia de noticias EFE.
Los Veintiocho recordaron que en las conclusiones del Consejo Europeo del 18 de diciembre de 2014 ya habían advertido que tomarían medidas adicionales si fuera necesario.
Asimismo, adelantaron que se ocuparán de esta cuestión en la próxima reunión, que se celebrará en Bruselas el próximo 12 de febrero.
La sesión extraordinaria de la Rada fue convocada tras el bombardeo que el pasado sábado se cobró 30 civiles muertos y un centenar de heridos en Mariupol, ciudad de medio millón de habitantes en el sur de la región de Donetsk, a orillas del mar de Azov.
Las autoridades de Kiev responsabilizaron del bombardeo a las milicias separatistas prorrusas, que poco antes del ataque habían anunciado el comienzo de una amplia ofensiva en todo el este de Ucrania.
En otro párrafo, el documento legislativo solicitó a los socios de Ucrania "impedir la impunidad de los culpables de crímenes contra la humanidad cometidos desde el comienzo de la agresión rusa".
También figuró un llamamiento a la comunidad internacional para declarar "organizaciones terroristas" a las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, aliadas de Moscú.
El contenido del documento del Parlamento ucraniano revela el deterioro de la situación en esa zona lindante con Rusia, un conflicto que ya causó más de 5.000 muertos, y que ayer llevó a Kiev a imponer un régimen de máxima alerta en todo el territorio nacional.
En paralelo, los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea, reunidos hoy en Bruselas, abordaron la situación en Ucrania y discutieron la nueva ayuda macrofinanciera de 1.800 millones de euros para Ucrania, anunciada por Bruselas a principios de enero.
"Creo que tenemos que apoyar a Ucrania en cualquier caso, pero claro que con la situación y la escalada (de violencia) se hace aún más urgente, por lo que vamos a discutir lo que se necesita y cómo encontrar apoyo para Ucrania", aseguró el ministro holandés de Finanzas, Jeroen Dijsselbloem, al llegar al encuentro.
El nuevo programa de ayuda macrofinanciera deberá ser aprobado por el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea, la institución que representa a los Veintiocho.
Además, dicha ayuda debe ser acompañada por la adopción de determinadas reformas en Ucrania.
La Comisión Europea anunció este lunes que ha decidido ampliar con 15 millones de euros su ayuda humanitaria en favor de Ucrania.
Por otro lado, Rusia desplazó hoy el 12° convoy de ayuda humanitaria a las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk, sumidas en encarnizados combates entre las milicias separatistas y el Ejército de Kiev.
"Los vehículos con carga humanitaria a bordo son manejados por conductores rescatistas que ya cuentan con la experiencia de llevar ayuda a (la cuenca minera de) Donbass, también en condiciones meteorológicas adversas", aseguró un vocero de Emergencias citado por la agencia rusa Interfax.
Agregó que en la región de Rostov, limítrofe con Ucrania, se sumarán al convoy otros camiones de distintas regiones rusas.
Desde que se iniciaron, en agosto, los once convoyes de ayuda rusos ya transportaron un total de 15.000 toneladas de ayuda humanitaria al este de Ucrania que sufre graves problemas con infraestructuras dañadas por las acciones militares de las partes beligerantes.
TELAM
"En vista del empeoramiento de la situación", señalaron los líderes de los Veintiocho en una declaración conjunta, "le pedimos al próximo consejo de Asuntos Exteriores que evalúe la situación y considere medidas adecuadas, en particular, acerca de nuevas medidas restrictivas dirigidas a la aplicación rápida y completa de los acuerdos de Minsk".
El primer ministro y ex presidente ruso, Dmitri Medvedev, advirtió que "en caso de este tipo de decisiones, me gustaría nuestra respuesta económica será sin restricciones". El presidente ruso, Vladimir Putin, aún no se ha pronunciado.
En tanto, la Rada Suprema (Parlamento) de Ucrania declaró hoy a Rusia "Estado agresor" en un documento aprobado en una sesión extraordinaria del cuerpo, con los votos de 271 de los 298 diputados presentes en la sala, acelerando el pulso del conflicto armado en esa ex república soviética.
El texto afirmó que Rusia "respalda el terrorismo y bloquea la labor del Consejo de Seguridad de la OTAN, con lo que pone en peligro la seguridad y la paz internacional".
En su declaración, los legisladores de Kiev hicieron además un llamamiento a los Parlamentos de otros países y a organizaciones internacionales a que también declaren a Rusia país agresor, a quién denuncian de estar implicada en el conflicto armado en el este del país.
El presidente ruso, Vladimir Putin, caracterizó ayer al ejército ucraniano de ser una "legión extranjera de la OTAN" cuyo objetivo es contener a Rusia, y advirtió que muchos ucranianos "intentan huir" a Rusia para no ser "usados como carne de cañón", en declaraciones en la universidad de San Petersburgo.
Las afirmaciones de Putin fueron simultáneas a otras de similar calibre de su ministro de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, que acusó al gobierno de Kiev de "torpedear" el proceso de paz y de optar por una solución militar para el ya prolongado conflicto en el este de Ucrania.
El comunicado de los Veintiocho añade que están "preparados para tomar medidas adicionales si fuera necesario" y reiteró su preocupación por el deterioro de la seguridad en el este de Ucrania.
"Observamos evidencia de apoyo continuo y creciente dado a los separatistas por parte de Rusia, lo que subraya la responsabilidad de Rusia. Instamos a Rusia a condenar las acciones de los separatistas y aplicar los acuerdos de Minsk", subraya el comunicado difundido por la agencia de noticias EFE.
Los Veintiocho recordaron que en las conclusiones del Consejo Europeo del 18 de diciembre de 2014 ya habían advertido que tomarían medidas adicionales si fuera necesario.
Asimismo, adelantaron que se ocuparán de esta cuestión en la próxima reunión, que se celebrará en Bruselas el próximo 12 de febrero.
La sesión extraordinaria de la Rada fue convocada tras el bombardeo que el pasado sábado se cobró 30 civiles muertos y un centenar de heridos en Mariupol, ciudad de medio millón de habitantes en el sur de la región de Donetsk, a orillas del mar de Azov.
Las autoridades de Kiev responsabilizaron del bombardeo a las milicias separatistas prorrusas, que poco antes del ataque habían anunciado el comienzo de una amplia ofensiva en todo el este de Ucrania.
En otro párrafo, el documento legislativo solicitó a los socios de Ucrania "impedir la impunidad de los culpables de crímenes contra la humanidad cometidos desde el comienzo de la agresión rusa".
También figuró un llamamiento a la comunidad internacional para declarar "organizaciones terroristas" a las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, aliadas de Moscú.
El contenido del documento del Parlamento ucraniano revela el deterioro de la situación en esa zona lindante con Rusia, un conflicto que ya causó más de 5.000 muertos, y que ayer llevó a Kiev a imponer un régimen de máxima alerta en todo el territorio nacional.
En paralelo, los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea, reunidos hoy en Bruselas, abordaron la situación en Ucrania y discutieron la nueva ayuda macrofinanciera de 1.800 millones de euros para Ucrania, anunciada por Bruselas a principios de enero.
"Creo que tenemos que apoyar a Ucrania en cualquier caso, pero claro que con la situación y la escalada (de violencia) se hace aún más urgente, por lo que vamos a discutir lo que se necesita y cómo encontrar apoyo para Ucrania", aseguró el ministro holandés de Finanzas, Jeroen Dijsselbloem, al llegar al encuentro.
El nuevo programa de ayuda macrofinanciera deberá ser aprobado por el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea, la institución que representa a los Veintiocho.
Además, dicha ayuda debe ser acompañada por la adopción de determinadas reformas en Ucrania.
La Comisión Europea anunció este lunes que ha decidido ampliar con 15 millones de euros su ayuda humanitaria en favor de Ucrania.
Por otro lado, Rusia desplazó hoy el 12° convoy de ayuda humanitaria a las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk, sumidas en encarnizados combates entre las milicias separatistas y el Ejército de Kiev.
"Los vehículos con carga humanitaria a bordo son manejados por conductores rescatistas que ya cuentan con la experiencia de llevar ayuda a (la cuenca minera de) Donbass, también en condiciones meteorológicas adversas", aseguró un vocero de Emergencias citado por la agencia rusa Interfax.
Agregó que en la región de Rostov, limítrofe con Ucrania, se sumarán al convoy otros camiones de distintas regiones rusas.
Desde que se iniciaron, en agosto, los once convoyes de ayuda rusos ya transportaron un total de 15.000 toneladas de ayuda humanitaria al este de Ucrania que sufre graves problemas con infraestructuras dañadas por las acciones militares de las partes beligerantes.
TELAM