Destrucción dejada por el grupo islamista |
NIGERIA.- Al menos 82 personas perdieron la vida ayer en un nuevo intento del grupo islamista Boko Haram por tomar el control de la norteña ciudad de Maiduguri, capital del estado de Borno, que es considerado su principal bastión.
Justo una semana después de que el grupo fundamentalista atacó diferentes puntos de Maiduguri, combatientes de Boko Haram trataron ayer de invadir de nuevo la ciudad, enfrentándose con las tropas gubernamentales.
Fuentes de seguridad informaron que en los enfrentamientos, que se prolongaron por varias horas, murieron al menos 70 extremistas, 10 diez civiles y dos uniformados, según un reporte del diario “This Day”.
Los islamistas lanzaron dos granadas “propulsadas por cohetes en el área Gindari Polo, matando a muchos civiles”, destacó un portavoz militar, que estuvo presente en los nuevos combates que se vivieron en Maiduguri entre la noche del sábado y hasta la mañana de ayer, en esa ciudad de Nigeria, nación azotada por los terroristas.
De los 70 combatientes abatidos, 50 perdieron la vida en la localidad de Dalwa, ubicada a unos 20 kilómetros de Maiduguri, donde hasta la tarde de este domingo aún se libraba una batalla entre las fuerzas de seguridad y los militantes de Boko Haram. Además de Dalwan, los distritos de Ngom, Molay y Jawuri, los puntos principales de entrada a Maiduguri, también fueron escenario de duros enfrentamientos y ataques de los milicianos de Boko Haram, que incendiaron viviendas y comercios.
Justo una semana después de que el grupo fundamentalista atacó diferentes puntos de Maiduguri, combatientes de Boko Haram trataron ayer de invadir de nuevo la ciudad, enfrentándose con las tropas gubernamentales.
Fuentes de seguridad informaron que en los enfrentamientos, que se prolongaron por varias horas, murieron al menos 70 extremistas, 10 diez civiles y dos uniformados, según un reporte del diario “This Day”.
Los islamistas lanzaron dos granadas “propulsadas por cohetes en el área Gindari Polo, matando a muchos civiles”, destacó un portavoz militar, que estuvo presente en los nuevos combates que se vivieron en Maiduguri entre la noche del sábado y hasta la mañana de ayer, en esa ciudad de Nigeria, nación azotada por los terroristas.
De los 70 combatientes abatidos, 50 perdieron la vida en la localidad de Dalwa, ubicada a unos 20 kilómetros de Maiduguri, donde hasta la tarde de este domingo aún se libraba una batalla entre las fuerzas de seguridad y los militantes de Boko Haram. Además de Dalwan, los distritos de Ngom, Molay y Jawuri, los puntos principales de entrada a Maiduguri, también fueron escenario de duros enfrentamientos y ataques de los milicianos de Boko Haram, que incendiaron viviendas y comercios.
La semana pasada, al menos 65 personas murieron y decenas de casas fueron destruidas en el ataque múltiple de Boko Haram en la ciudad, considerada cuna del grupo islamista radical. En medio de los fuertes enfrentamientos en Borno, seis personas murieron esta tarde por un atentado explosivo en el vecino estado de Yobe, en el noreste de Nigeria, atribuido también al grupo que desde hace meses mantiene bajo su control varias zonas de la región. El atentado se registró en el distrito de Potiskum, frente a la residencia de Sabo Garbu, candidato del Partido Democrático del Pueblo (PDP) para los distritos de Potiskum y Nangere, para las elecciones generales del 14 de febrero próximo.
De acuerdo con la versión de varios testigos, el atentado fue perpetrado por un atacante suicida que llegó frente a la residencia del político y detonó los explosivos, mientras el candidato sostenía una reunión con gran cantidad de seguidores. Autoridades locales indicaron que todo apunta a que Boko Haram (la educación occidental es un pecado, en lengua hausa) estuvo detrás de este nuevo atentado explosivo.
El año pasado, unas tres mil 500 personas murieron en múltiples ataques perpetrados por el grupo extremista, que según datos del gobierno nigeriano ha asesinado a unas 13 mil personas y herido a otras ocho mil en los últimos cinco años.
Notimex