El lanzamiento norcoreano fue anunciado por fuentes de Defensa en Seúl, Tokio y Washington.
También desencadenaron una nueva advertencia del presidente norteamericano Donald Trump de que considera la opción de una intervención militar. AFP.
El ensayo es el último a la fecha realizado este año por Corea del Norte, cuyo objetivo proclamado es desarrollar un misil balístico intercontinental capaz de transportar una ojiva nuclear hasta territorio continental norteamericano.
Los recientes lanzamientos de misiles y la amenaza norcoreana de realizar un nuevo ensayo nuclear han provocado llamados en favor de sanciones de la ONU más duras contra el país comunista, que vive prácticamente asilado del mundo.
También desencadenaron una nueva advertencia del presidente norteamericano Donald Trump de que considera la opción de una intervención militar.
El último lanzamiento de misil –de un modelo aún no identificado– se llevó a cabo cerca de la ciudad costera de Wonsan, en Corea del Norte, a las 05H09 locales (21H39 GMT del domingo), indicó el jefe del Estado Mayor de Seúl.
El misil se trasladó hacia el este. "El alcance era de unos 450 kilómetros", indicó el comunicado, precisando que expertos surcoreanos y norteamericanos intentan analizar en detalle el lanzamiento.
EEUU "monitorea de cerca"
El jefe de gabinete de Japón, Yoshihide Suga, indicó a la prensa que el misil cayó al parecer en su Zona Económica Exclusiva, que se extienden hasta 200 millas náuticas de la costa japonesa.
"Nuestro país nunca podrá tolerar las acciones provocadoras de Corea del Norte", indicó.
En Washington, el Comando del Pacífico norteamericano informó que el misil de corto alcance fue rastreado durante seis minutos hasta que cayó en el Mar de Japón. No fue considerado una amenaza para América del Norte.
El comando anunció que trabaja en una evaluación más detallada del lanzamiento.
"Seguimos monitoreando de cerca las acciones de Corea del Norte", precisó. "El Comando del Pacífico de Estados Unidos respalda el firme compromiso con la seguridad de nuestros aliados en la República de Corea y en Japón", agregó.}
El nuevo presidente surcoreano, Moon Jae-In, ordenó una reunión del consejo nacional de seguridad para abordar el disparo, indicó Yonhap.
Divergencias con China
Pyongyang ha llevado a cabo dos pruebas nucleares y decenas de lanzamientos de misiles en lo que va de año, a pesar de las importantes sanciones económicas impuestas por Naciones Unidas.
Los dirigentes del G7 calificaron el sábado pasado las pruebas nucleares y de misiles norcoreanos de "amenaza grave", y se mostraron dispuestos a tomar medidas al respecto.
China, principal aliado y socio comercial de Corea del Norte con poder de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU, prefiere sin embargo entablar un diálogo diplomático con Pyongyang y no imponerle nuevas sanciones.
Estados Unidos indicó que no descarta la posibilidad de negociaciones, pero exije como condición el fin de las pruebas de misiles.
El líder norcoreano Kim Jong-Un asegura que el régimen necesita las armas nucleares para protegerse de la amenaza de una invasión.
Arsenal de misiles
El Consejo de Seguridad adoptó dos grupos de sanciones el año pasado para aumentar la presión sobre Pyonyang e impedir que consiga los fondos que necesita para desarrollar sus programas militares.
En el cruce de declaraciones, Trump ha advertido que todas las opciones están sobre la mesa a la hora de abordar el programa norcoreano, aunque por ahora Washington se ha limitado a establecer sanciones y presión diplomática.
Pyongyang cuenta desde hace tiempo con misiles capaces de alcanzar Corea del Sur mediante cohetes Scud de un alcance de 500 kilómetros, y Japón, con misiles Rodong de un alcance de entre 1.000 a 3.000 kilómetros.
El Hwasong-12 probado anteriormente este año tiene por su parte un alcance estimado de 4.500 km y puede llegar en teoría hasta las bases estadounidenses de la isla de Guam, en el Pacífico.
Pyongyang suele dirigir a sus vecinos del sur apocalípticas amenazas y algunos habitantes ya empiezan a dar signos de preocupación.