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LA NOTICIA DESTACADA
El líder supremo del país persa advirtió a Tel Aviv y Washington sobre las acciones hostiles contra la república islámica. El líder supremo ...
Buenos Aires.- El peso argentino se abarató un 2,5% con respecto al dólar tras tres días consecutivos de subida y se cotiza este 4 de octubre a 39,6 unidades para la venta.
El peso argentino se vende a 39,6 unidades el dólar, de acuerdo al púbico Banco Nación.
Tras revalorizarse un 8,3% desde el pasado 1 de octubre, la moneda local perdió posiciones este jueves y pasó de las 38,6 unidades el miércoles a las 39,6.
La bolsa local también cayó un 0,7% hasta descender por debajo de las 32.000 unidades, mientras el riesgo país subió un 3,4% hasta alcanzar los 649 puntos.
Como realizó durante toda la semana, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) prepara una subasta de Letras de Liquidez (Leliq) a las que sólo pueden acceder los bancos.
Para absorber pesos del mercado, la autoridad monetaria ofreció durante la semana tasas de interés cada vez más altas.
El 3 de octubre adjudicó 109.520 millones de pesos (2.882 millones de dólares) en Leliq con rendimiento del 74% anual a siete días, y un promedio del 71,3%.
Desde el 1 de octubre rige un sistema de ajuste de la base monetaria que congela la cantidad de dinero circulante hasta junio de 2019.
El BCRA también inauguró una nueva política cambiaria que estableció un esquema de flotación del tipo de cambio entre los 34 y los 44 pesos, ajustable en tres por ciento mensual.
Mientras la divisa estadounidense se cotice dentro de esa franja, el Banco Central no intervendrá en el mercado.
Sputnik
Washington.-La revista Time incluyó también entre los posibles ganadores al líder independentista catalán Carles Puigdemont, y a organismos de derechos humanos o contra las armas nucleares.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump. El líder norcoreano, Kim Jong-un, el presidente de de Corea del Sur, Moon Jae-in, la canciller alemana, Angela Merkel, el ex presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva y el papa Francisco destacan entre los candidatos en las quinielas previas al Nobel de la Paz, que se anuncia este viernes en Oslo y para el que no hay favorito claro.
El acercamiento entre las dos Coreas, en guerra desde hace casi siete décadas, con las tres cumbres celebradas en los últimos meses entre Kim y Moon, y la histórica visita del presidente surcoreano a Pyongyang hacen que tanto él como el líder norcoreano encabecen los pronósticos de las casas de apuestas.
Con ellos aparece bien situado el presidente Trump, quien mantuvo con Kim la primera reunión entre los máximos mandatarios de ambos países y ha apoyado el proceso.
Trump, cuya elección parecía improbable no hace mucho, ha sido nominado tanto por un grupo de congresistas estadounidenses como por dos diputados del ultraderechista Partido del Progreso, una de las tres fuerzas que integran el gobierno noruego.
En contra de un premio a la distensión en Corea podría ir que el vicepresidente surcoreano Kim Dae-Jung ya fue galardonado con el Nobel en 2000 por esfuerzos en favor de la paz en Asia y en su propio país, que luego no resultaron en avances significativos.
La firma el mes pasado de un histórico acuerdo para poner fin a dos décadas de conflicto entre Eritrea y Etiopía avala las opciones de sus respectivos máximos mandatarios, el presidente Isaias Afwerki y el primer ministro Abiy Ahmed, que apoyan entre otros el noruego Centro Nansen para la Paz y el Diálogo.
El activista saudí Raif Badawi, la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la Unión para las Libertades Civiles en América (ACLU) aparecen destacados en los pronósticos.
La irrupción de la campaña de denuncias de abusos #MeToo podría justificar un premio a la joven yazidí Nadia Murad, que escapó del cautiverio del grupo terrorista ISIS en Irak; la activista Tarana Burke, la primera en usar la etiqueta, o el trabajo contra la violencia sexual del médico congoleño Denis Mukwege, un “eterno” candidato.
El magnate sueco Alfred Nobel, creador de los premios, dejó escrito que el de la Paz debía reconocer a quienes contribuyan “al hermanamiento de los pueblos y a la eliminación o reducción de armamento, así como formar o impulsar congresos de paz”, pero el Comité Nobel no siempre se ha ajustado del todo a esos criterios.
Así, ha reconocido en los últimos tiempos la lucha por el medioambiente -la keniana Wangari Maathai (2004) o Al Gore y Rajendra Pachauri (2007)- o contra la pobreza, con el bangladesí Mohamed Yunus y su banco de microcréditos Grameen Bank (2006).
La lista de supuestos favoritos incluye el Programa Mundial de Alimentos (PMA), el Consejo Ártico, Human Rights Defenders y el grupo antinuclear japonés Asociación Artículo 9 y el activista iraquí Yanar Mohammed.
El ex presidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont; la ex soldado Chelsea Manning; el fundador de WikiLeaks, Julian Assange; el ex analista de la CIA Edward Snowden; la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) y el diario ruso “Nováya Gazeta” también aparecen en las apuestas.
Como la abogada chechena Lidia Yusúpova, la iugur Rebiya Kadeer o el obispo mexicano José Raúl Vera López -favorito años atrás-, Mohammed ha ganado el premio de derechos humanos de la fundación noruega Rafto, que este año ha distinguido al jurista y defensor del pueblo polaco Adam Bodnar.
Ganadores del Rafto como la birmana Aung San Suu Kyi, el coreano Kim Dae-Jung, el expresidente de Timor Oriental José Ramos Horta y la abogada iraní Shirin Ebadi lograron el Nobel años después.
Las listas no son a menudo más que especulaciones, porque sólo si quienes nominan lo hacen público se puede saber la identidad de los candidatos, ya que el Comité Nobel noruego no confirma nombres hasta pasado medio siglo y sólo difunde el número total de aspirantes, 329 este año (217 individuos y, el resto, organizaciones).
Así se sabe también, por ejemplo, que el ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y la asociación argentina Abuelas de Plaza de Mayo figuran entre los nominados, que competirán por suceder en el palmarés del premio a la Campaña Internacional para la Abolición de las Armas Nucleares.
El de la Paz es el único de los seis premios que se otorga y se entrega fuera de Suecia, en Oslo, por deseo expreso de Alfred Nobel, ya que en su época Noruega formaba parte del reino sueco.
Clarin
Rio de Janeiro, Brasil. AFP Los brasileños celebran el domingo la primera vuelta de una elección presidencial que puede poner al frente de la mayor economía latinoamericana al ultraderechista Jair Bolsonaro, aclamado por sus admiradores como “el salvador de la patria”.
Los sondeos prevén una segunda vuelta el 28 de octubre entre el diputado Bolsonaro y el excalcalde de Sao Paulo Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT, izquierda) del encarcelado expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Quien resulte electo sucederá a Michel Temer, el más impopular de los mandatarios desde la restauración de la democracia en 1985, y tendrá por misión recomponer la credibilidad del Estado después de años de crisis económica, violencia endémica y escándalos de corrupción.
Bolsonaro, un excapitán del Ejército, de 63 años, y Haddad, excalcalde, de 55, son a la vez los candidatos con más intención de voto y con mayor índice de rechazo, en una muestra de las pasiones que agitan al país y que dejaron poco espacio a los candidatos de centro.
La última encuesta Datafolha del jueves da un 35% de intenciones de voto a Bolsonaro, frente a 22% para Haddad; el centroizquierdista Ciro Gomes y el centroderechista Geraldo Alckmin gravitan en torno al 10%.
Los dos favoritos aparecen empatados en las simulaciones de balotaje.
Pero algunos analistas estiman que Bolsonaro podría ganar en la primera vuelta, en caso de que sectores de clase media decidan emitir un "voto útil" para evitar que la izquierda vuelva al poder.
Los electores "acabarán votando mucho más por miedo o rabia que por convicción. Entreveo entonces una segunda vuelta mucho más radical, con riesgo incluso de violencia", afirma Geraldo Monteiro, politólogo de la Universidad del Estado de Rio de Janeiro (UERJ).
Las encuestas, sin embargo, distan de ser infalibles, apunta Monteiro, recordando que en 2014 muchos estudios preveían que el centroderechista Aécio Neves quedaría eliminado en la primera vuelta, aunque terminó compitiendo (y perdiendo) el balotaje con Dilma Rousseff, del PT.
Ahora, tanto Alckmin como Gomes apuestan por una sorpresa semejante.
Una campaña entre la cárcel y el hospital
Haddad realizó un ascenso fulgurante desde que fue designado el 11 de septiembre como sustituto del encarcelado expresidente Lula, favorito absoluto hasta que su candidatura fue invalidada a causa de su situación judicial. El exmandatario cumple una condena a 12 años de prisión por corrupción y lavado de activos.
La campaña se vio sacudida además por el atentado que sufrió Bolsonaro el 6 de septiembre, cuando un individuo le asestó una puñalada en el abdomen en un mitin. Aunque no pudo realizar nuevos actos públicos, siguió presente en las redes sociales y aumentó sustancialmente su ventaja en las encuestas.
Su popularidad también sobrevivió, e incluso aumentó, después de las masivas manifestaciones de mujeres que el sábado pasado denunciaron el historial de declaraciones misóginas, racistas y homófobas de este admirador de la dictadura militar (1964-85).
Pese a que se presenta como candidato del pequeño Partido Social Liberal (PSL), Bolsonaro recogió esta semana el apoyo de la poderosa bancada ruralista en el Congreso, de importantes pastores evangélicos y de medios empresariales que apostaban previamente por Alckmin.
Su receta se basó en propuestas sencillas para combatir males profundos, con un lema: "Brasil por encima de todo, Dios por encima de todos".
Armas y “valores tradicionales” vs. Inserción social
De llegar al poder, prevé flexibilizar el porte de armas para enfrentar la violencia que deja más de 60.000 muertos por año; proseguir el actual programa de austeridad para recuperar la confianza de los inversores después de dos años de recesión y dos de débil crecimiento; y defender los "valores tradicionales", para combatir la "ideología de género" en la educación.
Haddad, exministro de Educación de Lula, promete por su lado volver a los años de gloria del líder del PT, cuando los planes de inserción social y una economía boyante permitieron sacar a más de 30 millones de brasileños de la pobreza extrema.
La Paz.-El presidente Morales, quien aún digiere la derrota sufrida en La Haya, anunció que su país pisará el acelerador a fondo para la construcción del corredor ferroviario para unir los océanos Pacífico y Atlántico, aunque depende de una millonaria inversión y de acuerdos mancomunados con Brasil y Perú.
“Ahora vamos a acelerar, con esta mala experiencia de la Corte Internacional de Justicia, el tren bioceánico: salir hacia el Atlántico por el puerto Santos y al Pacífico por puerto Ilo. Pero además de eso también vamos a acelerar Puerto Bush”, sobre la hidrovía con Paraguay, dijo el gobernante la víspera tras regresar de La Haya, donde presenció la lectura del fallo.
La ministra de Planificación, Mariana Prado, dijo que las estimaciones hablan de unas inversiones “entre 600 y 800 millones de dólares” sobre la hidrovía y que en el caso del tren interocéanico “está mucho más avanzado (porque) tenemos la manifestación del gobierno alemán de participar con nosotros” en la ejecución, a un costo preliminar de unos 15.000 millones de dólares. Esta obra también interesa a Suiza y España.
“Se va a hacer de la manera más rápida posible”, dijo la ministra.
La Haya
La Corte Internacional de Justicia (CIJ) falló el pasado lunes que Chile no tiene la obligación de negociar con La Paz sobre su centenario reclamo para una salida soberana al océano Pacífico, la que perdió en una guerra a fines del Siglo XIX.
La frustrada posibilidad de abrir una negociación reflotó en Bolivia la idea de que su comercio no puede seguir dependiendo de los puertos, como los de Antofagasta, Iquique o Arica, por donde fluye el grueso de sus actividades económicas.
Los empresarios privados volvieron a poner en el tapete que el país tiene vías alternas para sus importaciones y exportaciones, que no están aprovechadas de manera eficiente, como los llamados puertos sobre la hidrovía Paraná-Paraguay que desembocan en el océano Atlántico.
“No podemos, como país, seguir dependiendo en un 75% de nuestra carga marítima de exportaciones e importaciones que pasen por puertos chilenos y que dejan beneficios en aquel país”, afirmó en rueda de prensa Gary Rodríguez, gerente de la ONG privada Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).
Mencionó, por ejemplo, que entre 2013 y 2017 se registraron unos 60 paros en puertos chilenos que causaron un daño económico por unos 300 millones de dólares a los operadores comerciales bolivianos.
Según Rodríguez, hay que “mirar con carácter de urgencia alternativas a corto plazo, como la posibilidad de activar mucho más los puertos que en la cabecera de la hidrovía están dispuestos y ya funcionando para sacar la carga boliviana”.
Unos cuatro embarcaderos están sobre la vía fluvial, en la casi triple frontera que comparten Bolivia, Brasil y Paraguay y que siempre se han visto como vías alternativas a las terminales chilenas.
El gerente de la patronal Cámara Nacional de Industrias, Fernando Hinojosa, recomendó por su parte que el gobierno debe invertir recursos para potenciar la zona de Ilo, que “tiene facilidades que no se han aprovechado en décadas”, desde que se firmaron acuerdos bilaterales en 1992, y que Bolivia haga cumplir el Tratado de 1904 suscrito con Chile que garantiza un tránsito irrestricto.
Chile reconoce a Bolivia el derecho de tránsito comercial por puertos chilenos en el Pacífico así como el uso gratuito de sus instalaciones y arancel cero para sus exportaciones e importaciones. Según las autoridades chilenas, el 80% de las mercancías que pasan por el puerto de Arica, fronterizo con los dos países, procede de Bolivia.
AFP
Nueva York. Jeff Bezos, fundador y director ejecutivo de Amazon, es el número uno en la lista de Forbes de los 400 estadounidenses más ricos con una fortuna de 160.000 millones de dólares, un récord que hace que sea la primera vez desde 1994 que el cofundador de Microsoft, Bill Gates, no encabece este ránking.
Jeff Bezos, cuya fortuna se incrementó en 78.500 millones de dólares en solo el último año, lidera esta lista de Forbes que fue difundida hoy, al que sigue Bill Gates, con 97.000 millones de dólares, que ocupó el puesto número uno durante 24 años consecutivos.
El financiero Warren Buffett, con una fortuna de 88.300 mil millones, ocupa el tercer puesto del ránking, seguido de Mark Zuckerberg, de Facebook, que ocupa el cuarto puesto con un patrimonio neto de 61.000 millones de dólares, a pesar de ser 10.000 millones más pobre de lo que era hace un año.
Completa el "top 5" Larry Ellison (Oracle), con un patrimonio de 58.400 millones de dólares.
Se da la circunstancia de que el presidente de EE.UU., Donald Trump, cayó al número 259 en la lista Forbes, si bien su patrimonio neto se mantuvo igual desde el año pasado en 3.100 millones de dólares. Trump ocupó el puesto número 248 en 2017.
Por primera vez Forbes tiene también en cuenta para su ránking la inversión filantrópica de los multimillonarios, por lo que examinó factores como donaciones de por vida y el porcentaje que representa de su fortuna.
En todo caso, el protagonista de la lista de este año es el creador de Amazon. El patrimonio neto de Jeff Bezos es de 160.000 millones de dólares, por lo que es la primera vez además que un miembro de este selecto grupo de 400 millonarios americanos aparece ya como un "centimillonario", tal como recuerda la revista Forbes.
Y es que Bezzos casi duplicó su patrimonio neto en el último año, agregando a su fortuna 78.500 millones de dólares gracias a un aumento del 104 % en el precio de las acciones de Amazon.
Su empresa de comercio electrónico va a toda máquina puesto que registró más de 100.000 millones en ventas netas en los primeros seis meses de 2018, un aumento del 41 % en comparación con el año anterior.
Bezos se estrenó en la lista Forbes en 1998, cuando debutó en el número 102 de los estadounidenses más ricos con un patrimonio neto de 1.600 millones de dólares, solo cuatro años después de fundar Amazon y un año después de que cotizara la compañía.
Los 40 multimillonarios, según calculó Forbes, tienen un patrimonio neto total récord de 2,9 billones de dólares, por encima de los 2,7 billones de 2017.
"Estamos viendo más multimillonarios que nunca, gracias en parte al fuerte mercado de valores y al continuo boom tecnológico. Por primera vez, más de un tercio de los multimillonarios de EE.UU. eran demasiado pobres para estar en lista de élite de los 400 más ricos de la nación ", dijeron Luisa Kroll y Kerry Dolan, portavoces de Forbes Media.
FUENTE: EFE