Una adolescente de 15 años ha sido liberada del estado de esclavitud en que vivió durante los últimos 12 años, encerrada en un garaje de Buenos Aires junto a un mono y un perro.
Desde 2001 sus tutores tenían la custodia provisional, con miras a la adopción definitiva de la chica, cuya madre biológica, de condición humilde y con otros siete hijos, la entregó por no poder mantenerla.
Seguidores del culto de "San la Muerte" -muy extendido en Latinoamérica y pagano para el catolicismo- los aspirantes a la adopción daban de comer a la niña lo mismo que al mono y el perro, según informó este miércoles la agencia oficial Télam.
A raíz de ese estado de inanición, la joven ahora pesa solamente 15 kilos y sufre un fuerte retraso madurativo. Por ello ha sido ingresada en la unidad de cuidados intensivos de una clínica porteña.
Los tutores, cuyas identidades y datos no han trascendido, están en prisión preventiva. Y la jueza de instrucción María Gabriela Lanz rechazó un pedido de excarcelación presentado por los abogados.
Durante los primeros años hubo contacto entre la familia de la niña y los detenidos pero en 2005 se interrumpió. Nadie reclamó hasta que una hermana biológica cumplió 18 años y comenzó a buscarla.
No la veía desde hacía nueve años y al encontrar la casa en que suponía que estaba su hermana empezó a sospechar y alertó a la policía de una posible situación irregular, cuya verdadera dimensión aún desconocía.
El allanamiento policial puso al descubierto la escena de terror. Según la joven esclavizada contó luego por el sistema de cámara Gesell, sólo había salido del garaje dos veces en los últimos años. Y solía recibir palizas con 'cinturonazos' de sus captores, entre otros motivos, cuando comía las sobras del pienso del mono.
Fuente: elmundo.es
Desde 2001 sus tutores tenían la custodia provisional, con miras a la adopción definitiva de la chica, cuya madre biológica, de condición humilde y con otros siete hijos, la entregó por no poder mantenerla.
Seguidores del culto de "San la Muerte" -muy extendido en Latinoamérica y pagano para el catolicismo- los aspirantes a la adopción daban de comer a la niña lo mismo que al mono y el perro, según informó este miércoles la agencia oficial Télam.
A raíz de ese estado de inanición, la joven ahora pesa solamente 15 kilos y sufre un fuerte retraso madurativo. Por ello ha sido ingresada en la unidad de cuidados intensivos de una clínica porteña.
Los tutores, cuyas identidades y datos no han trascendido, están en prisión preventiva. Y la jueza de instrucción María Gabriela Lanz rechazó un pedido de excarcelación presentado por los abogados.
Durante los primeros años hubo contacto entre la familia de la niña y los detenidos pero en 2005 se interrumpió. Nadie reclamó hasta que una hermana biológica cumplió 18 años y comenzó a buscarla.
No la veía desde hacía nueve años y al encontrar la casa en que suponía que estaba su hermana empezó a sospechar y alertó a la policía de una posible situación irregular, cuya verdadera dimensión aún desconocía.
El allanamiento policial puso al descubierto la escena de terror. Según la joven esclavizada contó luego por el sistema de cámara Gesell, sólo había salido del garaje dos veces en los últimos años. Y solía recibir palizas con 'cinturonazos' de sus captores, entre otros motivos, cuando comía las sobras del pienso del mono.
Fuente: elmundo.es