ISIS volvió a cumplir su amenaza. Un video difundido en las redes sociales, del cual aún no se ha verificado su autenticidad, muestra a un verdugo con la cabeza ensangrentada del estadounidense Peter Kassig a sus pies.
El victimario está vestido de negro de la cabeza a los pies. No deja ver su rostro, sólo se le ven los ojos. Este video no muestra el sanguinario crimen contra la víctima, que aparecía simpre arrodillado y que era sentenciado con un cuchillo directo en la garganta. Solo aparece el asesino con la cabeza tirada a sus pies.
El video muestra a un yijadista enmascarado. Dice que la cabeza es supuestamente de Kassig. La escena es diferente a la de las anteriores decapitaciones: el verdugo, firme, aparece desde lo alto que sería un monte para mostrar a la ciudad de Dabiq, en la provincia de Alepo, de fondo. Luego intercambia la imagen con la típica del desierto de otros videos.
En inglés, y con acento británico, el miliciano afirma: “Este es Peter Kassig, un ciudadano de Estados Unidos”.
Las imágenes comenzaron a circular durante la madrugada de este domingo. La víctima no es claramente identificable.
La comunidad de inteligencia de Estados Unidos está "trabajando lo más rápido posible" para determinar la autenticidad del video, dijo la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional estadounidense, Bernadette Meehan. De confirmarse, el asesinato de Kassig sería el quinto de un rehén occidental en manos del grupo.
Su asesino sería el mismo hombre -investigado por la inteligencia británica como uno de sus nacionales, combatiente ahora en Siria-, que podría haber resultado herido en un bombardeo según el diario Mail on Sunday.
"Si se confirma, estamos consternados por el brutal asesinato de un trabajador inocente, y expresamos nuestro más sentido pésame a su familia y amigos", dijo Meehan.
Los padres de Kassig, Ed y Paula Kassig, reconocieron los informes de la muerte de su hijo en un comunicado. Dijeron que iban a esperar la confirmación del gobierno y pidieron privacidad, reportóCNN.
Con este video, la comunidad mundial vuelve a sentir el horror del grupo al que se le conoce por sus sangrientas decapitaciones. Kassig no es su única víctima. Los yihadistas marchan frente a los prisioneros dispuestos en fila y van recogiendo de una caja de madera largos cuchillos, antes de forzar a las víctimas a arrodillarse, para después decapitarlas. Parecen ser soldados de las tropas oficiales del presidente sirio Bachar el Asad.
"Estoy horrorizado por el asesinato a sangre fría de Abdul-Rahman Kassig. ISIS ha demostrado una vez más su depravación. Mis pensamientos están con su familia", indicó en su cuenta de Twitter el primer ministro británico, David Cameron.
Al final, los terroristas no dudan en volver a lanzar sus amenazas contra EEUU y el Reino Unido, especialmente.
“Para [[Barack]] Obama, el perro de Roma, hoy estamos matando a los militares de Asad y mañana sacrificaremos a los suyos”, ultiman.
¿Quién es Peter Kassig?
El trabajador humanitario estadounidense, conocido como Peter Kassing antes de convertirse al Islám, había sido capturado el año pasado.
Peter Edward Kassig vivió la guerra y el horror de cerca en Irak. Es un veterano de los Rangers que en 2012 decidió fundar una organización de ayuda a las víctimas de los conflictos armados. Ahora, este exmilitar estadounidense se ha vuelto una víctima más en manos del grupo terrorista Estado Islámico.
La víctima de ISIS antes Kassig fue el trabajador humanitario Alan Henning. Repitiendo la historia de los cuatro videos anteriores, al final de las imágenes mostraron a quien sería su próxima víctima: Peter E. Kassig.
Peter E. Kassig tenía 26 años, nació en Indiana y se mudó a Beirut tras participar de la guerra en Irak para ayudar a los refugiados y desplazados por el conflicto armado en Siria.
En julio de 2012, fundó Special Emergency Response and Assistance (SERA) para asistir a los refugiados. Ese mismo año, había trabajado en un hospital de Trípoli en Líbano.
Su experiencia allí lo cambió para siempre y decidió que debía dedicar su vida a ayudar.
“La cantidad de apoyo y respuesta de la gente de todo el mundo me motivó a organizarme y a desarrollar una plataforma a través de la cual las personas pudieran enviar donaciones para apoyar mi trabajo”, dijo en un artículo que publicó en Internet.
Así fue como Kassig y SERA llegaron a Siria con carpas, mantas, cocinas portátiles y otros utensilios para los más necesitados. “Puedo elegir entre entregar miles de dólares en antibióticos para mujeres y niños o puedo ser un joven más con un arma”, dijo.
Se sabe que Kassig estuvo trabajando en Siria con los refugiados, que enseñó primeros auxilios y distribuyó ropa, medicamentos y alimentos. Pero no hay detalles de cómo terminó en manos de ISIS, el grupo terrorista que ha decapitado a cuatro occidentales desde agosto y que acaba de amenazarlo.
Kassig se había enlistado con los Rangers en 2006, al año siguiente fue convocado para ir a Irak y en 2012 fue dado de baja por razones médicas. Estudiaba ciencias políticas en la Universidad de Butler cuando –durante el receso de primavera- decidió viajar a Beirut para ver de primera mano la crisis en Siria.
“Quería entender mejor mi rol en el conflicto de Irak y su impacto en Medio Oriente en general”, explicó en una entrevista con la revista Time publicada el año pasado.
“No conozco a una sola mujer, hombre o niño que no pueda esbozar una sonrisa y un mensaje de fortaleza y esperanza", agregó el fundador de esta organización de ayuda de emergencia.
Su ong se centra “en dar apoyo logístico y asistencia en áreas demasiado difíciles de operar con eficacia para otras organizaciones humanitarias. Por lo general, esto significa zonas de conflicto. Nuestro foco operativo actual es la guerra civil que ocurre en Siria”, había explicado Kassig.
El sitio de su organización tiene publicada la siguiente leyenda: “Debido a la actual situación de seguridad en Siria, SERA ha cesado temporalmente sus operaciones”.
Con miedo, pero en paz
El joven estaba en la región desde marzo de 2012, cuando había viajado a El Líbano con motivo de sus vacaciones universitarias.
Tras haber sido testigo de los sufrimientos de la población siria, envió un correo electrónico a su familia y sus amigos para anunciarles que no regresaría de inmediato, informa la Agencia France Press.
"Intenté vivir mi vida del modo que corresponde a lo que yo creo, pero la verdad es que casi toda mi vida no hice sino buscar mi vocación y aún no la había encontrado. Aquí, en este país, encontré mi vocación", escribió.
El mes pasado, su padre, Ed Kassig, explicaba que su hijo había "ayudado a formar a 150 civiles para que pudieran prestar cuidados médicos a las personas en Siria", añadiendo que "daba alimentación, vestimenta y medicamentos a los que lo necesitaban".
"Desarrolló afecto y admiración por el pueblo sirio, se sentía como en casa en Siria. El recorrido de nuestro hijo culminó cuando abrazó el islam", subrayó.
En un correo electrónico a un amigo en 2012, Kassig describió la desolación de la guerra y su esperanza por el futuro.
"¿Cómo hablarles de los muros acribillados de balas y de las flores que se depositan encima?", escribió. "La guerra no se detiene jamás, no hace sino desplazarse...", señaló.
En junio pasado, en una carta enviada a sus padres, Peter Kassig hablaba de su "miedo de morir".
"Evidentemente tengo miedo de morir, pero lo más duro es no saber, plantearse interrogantes, esperar y preguntarme si puedo aguardar sea lo que sea. Estoy muy triste por todo lo que esto produce y de que sufran en casa por ello", escribía.
"Si muero, creo que nosotros, ustedes y yo, al menos podremos encontrar consuelo pensando que fui (a Siria) para intentar aliviar el sufrimiento y ayudar a aquellos que lo necesitan", continuaba su carta.
"De acuerdo a mi fe, rezo todos los días y en ese sentido, no estoy furioso por mi situación (...). Estoy en paz con mis convicciones", afirmaba.
Univision.com