El informe anual de Reporteros sin Frontera establece que entre los países más mortíferos se encuentran México y Honduras.Solo en el ataque a la revista satírica francesa, Charlie Hebdo, murieron ocho periodistas.
Al menos 67 periodistas murieron asesinados en el ejercicio de su trabajo en todo el mundo durante 2015, según un reporte de la organización no gubernamental, Reporteros sin Fronteras.
El número podría ser aún mayor, pues los 67 son solo parte de los 110 periodistas que murieron debido a su labor o perdieron la vida en circunstancias sospechosas.
Del total, 49 fueron asesinados deliberadamente o tomados como blanco, 43 sin motivo determinado y 18 en el ejercicio de su profesión.
A estas cifras hay que añadir además a 27 periodistas ciudadanos y siete colaboradores de medios de comunicación que también fueron asesinados.
Irak, Siria y Francia encabezan la lista de países más mortíferos, aunque en el caso de Francia, solo el ataque terrorista a la revista satírica Charlie Hebdo, ocurrido en París el 7 de enero, cobró la vida de 12 personas, entre ellas ocho periodistas.
Otros países incluidos entre los 10 primeros de la lista están México, donde murieron 8 periodistas, y Honduras, que registró 7.
El informe señala que el elevado número de reporteros asesinados durante el año –con el que asciende a 787 la cifra de periodistas asesinados en el ejercicio de su profesión o debido a ella desde 2005– “se debe a una violencia que se ejerce cada vez más de forma deliberada contra los periodistas”.
“También muestra el fracaso de las iniciativas para proteger a los periodistas”, agrega el informe.
El reporte apunta que si bien en 2014 dos tercios de los casos de reporteros asesinados en el mundo se registraron en zonas de conflicto, en 2015 la proporción se invirtió por completo: dos tercios de los periodistas asesinados perdieron la vida en países que se dice están “en paz”.
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