- Tras el veredicto publicado, Myriam Benítez incluso apretó los párpados de sus ojos bastante llorosos, se dejó caer de rodillas rápidamente en la parte trasera del concurrido juzgado de Miami-Dade y unió las manos en religiosa oración. Después de unos 12 años de agonía, Benítez escuchó luego finalmente lo que ella siempre quiso.
Las declaraciones que se han escuchado son tremendas. “Wendy no tuvo vida después de usted”, dijo a Escoto la fiscal Gail Levine.
Eso se produjo durante el cierre: “El le quitó la vida, sin pensarlo, desvergonzadamente, por dinero”, agregó mirando en ese momento al jurado.
Michel Escoto de 42 años y natural de Miami fue declarado ayer culpable de la muerte de su mujer en 2002, Wendy Trapaga.
Acabó con la vida de su nueva esposa, cuatro días después de contraer matrimonio, con el objetivo de hacerse con la cuantía de una póliza de un seguro de vida que ascendía a un millón de dólares.
Miguel Escoto urdió un plan para matar a Trapaga por dinero. Así lo sentenció el veredicto del jurado tras escuchar el testimonio del propio acusado.
Este ofreció varias versiones sobre lo sucedido plagadas de contradicciones, y el de su ex novia y cómplice del mismo.
Yolanda Cerrillo, que recibió inmunidad judicial, admitió ante el jurado que lo ayudó a planear el asesinato, molió el Percocet para drogarla
Además, por si fuera poco practicó con el acusado cómo ahogar a la muchacha, y le ayudó a deshacerse del arma del crimen.
Miguel Escoto tras varios intentos fallidos de acabar con la vida de la chica de 21 años finalmente la estranguló y golpeó con una barra de hierro.
Ahora tendrá que cumplir cadena perpetua por asesinato en primer grado, o asesinato con premeditación.
Mientras la familia de la víctima después de 12 años respira tranquila ante el esclarecimiento del feroz asesinato.
Fue un juicio de lo más tremendo en el que Escoto se fue poniendo cada vez más colérico al mismo tiempo que los fiscales lo acorralaban.
En este punto, la jueza de circuito de Miami-Dade, Marisa Tinkler Méndez, se mostró paciente pero en varios momentos tuvo que llamar especialmente la atención.
No solo eso, ya que además la magistrataad lo declaró culpable de desacato al tribunal por amenazar al abogado. Ahí es nada.
Fuente: ideal.es
Eso se produjo durante el cierre: “El le quitó la vida, sin pensarlo, desvergonzadamente, por dinero”, agregó mirando en ese momento al jurado.
Michel Escoto de 42 años y natural de Miami fue declarado ayer culpable de la muerte de su mujer en 2002, Wendy Trapaga.
Acabó con la vida de su nueva esposa, cuatro días después de contraer matrimonio, con el objetivo de hacerse con la cuantía de una póliza de un seguro de vida que ascendía a un millón de dólares.
Miguel Escoto urdió un plan para matar a Trapaga por dinero. Así lo sentenció el veredicto del jurado tras escuchar el testimonio del propio acusado.
Este ofreció varias versiones sobre lo sucedido plagadas de contradicciones, y el de su ex novia y cómplice del mismo.
Yolanda Cerrillo, que recibió inmunidad judicial, admitió ante el jurado que lo ayudó a planear el asesinato, molió el Percocet para drogarla
Además, por si fuera poco practicó con el acusado cómo ahogar a la muchacha, y le ayudó a deshacerse del arma del crimen.
Miguel Escoto tras varios intentos fallidos de acabar con la vida de la chica de 21 años finalmente la estranguló y golpeó con una barra de hierro.
Ahora tendrá que cumplir cadena perpetua por asesinato en primer grado, o asesinato con premeditación.
Mientras la familia de la víctima después de 12 años respira tranquila ante el esclarecimiento del feroz asesinato.
Fue un juicio de lo más tremendo en el que Escoto se fue poniendo cada vez más colérico al mismo tiempo que los fiscales lo acorralaban.
En este punto, la jueza de circuito de Miami-Dade, Marisa Tinkler Méndez, se mostró paciente pero en varios momentos tuvo que llamar especialmente la atención.
No solo eso, ya que además la magistrataad lo declaró culpable de desacato al tribunal por amenazar al abogado. Ahí es nada.
Fuente: ideal.es