La brecha entre Arabia Saudita e Irán “se ha ensanchado rápidamente hasta convertirse en el peor conflicto en décadas entre los dos países”, escribe el analista James Stafford. Estima que una confrontación entre ambos países podría disparar el precio del crudo a 250 dólares el barril.
Guerra aumentaría precio del crudo |
Aunque los aliados sunitas de Arabia Saudita “siguieron en gran medida el juego”, degradando las relaciones diplomáticas con Irán, muchos de ellos son conscientes de las consecuencias que tendría un conflicto en la región, por lo que no cortan totalmente las relaciones bilaterales como sí hizo Arabia.
Stafford recuerda que en el pasado las tensiones geopolíticas en Oriente Medio, sobre todo con la participación de los grandes productores de petróleo, “habrían sumado unos cuantos dólares al precio del petróleo”.
Sin embargo, los recientes acontecimientos apenas se han reflejado en el mercado petrolero y, a juicio de Stafford, esto se debe a que “la superabundancia mundial” en el suministro de petróleo resulta ser ahora un factor más importante que cualquier posibilidad de interrupción del suministro.
“Pero ¿y si la actual ‘guerra fría’ entre Arabia Saudita e Irán se caldea?”, se pregunta el analista. En su opinión, Arabia Saudita tiene varias razones para no dar marcha atrás, una de las cuales es “el sentimiento muy real de estar asediada en múltiples frentes”, desde los extremistas en el propio país hasta el crecimiento del poder de Irán, pasando por los bajos precios del crudo y una relación rota con EEUU. “El acuerdo nuclear entre Irán y Occidente fue la confirmación de la sensación de Riad de que está cada vez más inseguro”, explica.
Según el experto, una confrontación militar directa entre Teherán y Riad tendría consecuencias catastróficas para los mercados del petróleo, incluso con exceso de oferta. El analista cita a Hossein Askari, profesor de la Universidad George Washington que predijo que una guerra entre los dos países podría provocar interrupciones en el suministro, con impactos sobre los precios.
AFP/agencias