El ex jefe de la Iglesia católica en Australia, tesorero del Vaticano desde 2014, prestaba declaración ante una comisión de investigación sobre los delitos de pederastia en Australia.
Debido a sus problemas cardíacos, el ex arzobispo de Melbourne y luego de Sídney, de 74 años, declara por videoconferencia desde un hotel de Roma.
La comisión de investigación se interesa actualmente por la respuesta que la Iglesia australiana dio a las acusaciones de pederastia contra el clero católico, sobre todo los años setenta, en la ciudad Ballarat (Estado de Victoria), donde creció monseñor Pell.
El lunes reconoció que la Iglesia había “metido la pata” en su gestión de los sacerdotes pederastas.
“Cuento con el apoyo total del papa”, declaró a la prensa antes de la segunda jornada de audición.
La comisión examina el caso de Gerald Ridsdale, sacerdote pederasta australiano reincidente múltiple, condenado por agredir a medio centenar de muchachos entre 1960 y 1980.
El cardenal Pell, que vivió un tiempo en la misma casa que Ridsdale, ha negado en todo momento que conociera las tendencias del ex sacerdote, haberlo trasladado de parroquia en parroquia cuando era cardenal o haber intentado comprar el silencio de víctimas del pederasta.
La comisión preguntó si las tendencias del ex sacerdote pederasta eran notorias dentro de la Iglesia.
El cardenal Pell explicó que nunca estuvo al tanto.
“No puedo decir que jamás hubiera sabido que todo el mundo sabía”, declaró. “Yo no sabía si era o no era notorio. Es una historia triste que no tenía gran interés para mí”.
Exclamaciones de incredulidad acogieron estas palabras en la sala de audiencias de Sídney y la comisión pidió al cardenal Pell que se explicara.
“El sufrimiento, por supuesto, era real y lo lamento mucho pero no tenía razón alguna de interesarme por el alcance del mal perpetrado por Ridsdale”, dijo.
Ex obispo de Ballarat, Ronald Mulkearns reconoció haber estado al corriente de acusaciones contra Ridsdale y haberlo desplazado de parroquia en parroquia pero el cardenal Pell negó siempre haber sabido, a pesar de su función de consejero del obispo a partir de 1977.
La Comisión Real para una Respuesta Institucional al Abuso Sexual de Menores comenzó sus labores en abril de 2013, tras diez años largos de presiones a favor de investigaciones sobre acusaciones de pederastia en las escuelas, centros religiosos y organismos sociales.