Un bus que trasladaba estudiantes en el litoral del estado de Sao Paulo se estrelló y volcó, dejando 18 muertos y decenas de heridos.
El vehículo, con 46 pasajeros, se despistó el miércoles de noche en la carretera que une las localidades de Mogi das Cruzes y Bertioga, a unos 120 kilómetros de la capital económica del país, y quedó completamente destruido.
"Hay 18 muertos hasta el momento, uno de los cuales aún no fue identificado", dijo a agencia AFP un asesor de la policía de Guarujá, distrito al cual fueron trasladadas las víctimas.
Los familiares de los fallecidos, la mayoría jóvenes universitarios, se acercaron al Instituto Médico Legal de Guarujá para reconocer los cuerpos, en un desfile marcado por una honda tristeza.
"Además de mi sobrino, un vecino mío murió. Supe por algunos estudiantes que el conductor estaba haciendo adelantamientos en la sierra, poco antes del accidente", contó al mismo periódico Gilmar Koch, tío de uno de los heridos.
Las primeras pericias señalaron que el vehículo habría volcado sobre la carretera tras lo cual se habría arrastrado por el asfalto golpeando árboles antes de caer en un badén.
Más temprano, el cuerpo de bomberos de Sao Paulo había descrito el accidente en su cuenta de Twitter: "El ómnibus perdió el control y chocó contra una roca de la pista contraria y luego volcó".
Imágenes de la televisión mostraron que el frente y el techo del autobús habían desaparecido por el impacto y apenas se distinguían hierros retorcidos apoyados sobre la carrocería y el chasis del vehículo.
"La extensión del daño va a complicar la investigación. Puede que se haya dormido el conductor (...) Inicialmente puedo decir que hubo exceso de velocidad", dijo el delegado policial Fabiano Pierri en el lugar de la tragedia.
El vehículo fue retirado de la zona de la catástrofe. Al respecto, el presidente interino, Michel Temer, se declaró en estado de shock a raíz del accidente y anticipó que convocará a órganos de fiscalización "para evitar que se repitan tragedias como esta".
Las primeras pericias señalaron que el vehículo habría volcado sobre la carretera tras lo cual se habría arrastrado por el asfalto golpeando árboles antes de caer en un badén.
Más temprano, el cuerpo de bomberos de Sao Paulo había descrito el accidente en su cuenta de Twitter: "El ómnibus perdió el control y chocó contra una roca de la pista contraria y luego volcó".
Imágenes de la televisión mostraron que el frente y el techo del autobús habían desaparecido por el impacto y apenas se distinguían hierros retorcidos apoyados sobre la carrocería y el chasis del vehículo.
"La extensión del daño va a complicar la investigación. Puede que se haya dormido el conductor (...) Inicialmente puedo decir que hubo exceso de velocidad", dijo el delegado policial Fabiano Pierri en el lugar de la tragedia.
El vehículo fue retirado de la zona de la catástrofe. Al respecto, el presidente interino, Michel Temer, se declaró en estado de shock a raíz del accidente y anticipó que convocará a órganos de fiscalización "para evitar que se repitan tragedias como esta".