El primer día de su gobierno no pudo ser más convulso. En pocas horas ha tenido un enfrentamiento diplomático con España, ha prohibido la marcha de la oposición prevista para el miércoles, ha ordenado a la fiscalía que prepare un informe contra los líderes de la oposición Henrique Capriles y Leopoldo López "por incitar al odio" y ha atribuido al departamento de estado de EEUU los hechos de violencia registrados en el país como fruto de las protestas."Hoy declaro que hubo un golpe de estado. Y lo hemos derrotado. Un golpe anunciado de antemano, que se produjo anoche. ¿Qué hubiera pasado si yo, Nicolás Maduro, presidente de la República, conductor de esta patria, hijo de Chávez, me hubiera vuelto loco como se volvió loco el candidato de la burguesía amarilla (Capriles). Y hubiera dicho, todos a la calle, a quemar las sedes. ¿Qué hubiera pasado? Qué irresponsables. Yo les comparé con el partido nazi y no me equivoqué".
Maduro hizo estas declaraciones durante la inauguración de un Centro de Diagnóstico Integral (CDI). Aprovechó este acto para hacer un llamamiento a la paz y a "no caer en provocaciones". "Frente a la intolerancia firmeza y frente al odio amor", ha argumentado. Además criticó que intentaran asaltar la casa de Tibisay Lucena, la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE)."¿Eso es democracia o fascismo? ¿Eso se parece a Hitler o a Cristo Redentor", se preguntó en voz alta el presidente, que insistió en que no estaba exagerando.
En ese contexto, denunció que Capriles está detrás de la muerte de siete personas y en la quema de un centro de atención médica (CDI). Muertos y ataques sobre los que, paradójicamente, la televisión pública no ha ofrecido datos y apenas un par de fotos confusas. Las pruebas exhibidas por el ministro de Interior, Néstor Reverol, se limitaron a tres fotos con jóvenes quemando basura y sólo dio el nombre de dos víctimas.
"Es un plan parecido al que hicieron en Siria y en Libia, quieren llenar el país de múltiples focos de violencia", denunció Maduro en su segunda cadena nacional desde que llegó al poder hace 20 horas. Sin embargo, solo se ha encontrado con grupos de opositores protestando de forma festiva frente a las sedes del Consejo Nacional Electoral a lo largo del todo el país.
El presidente también advirtió luego que podría radicalizar "a fondo" la revolución bolivariana si la oposición continúa agitando la violencia callejera. "Revolución socialista es lo que viene y si siguen con la violencia podemos radicalizar la revolución. Estoy dispuesto a radicalizar, ir a fondo", señaló en una reunión con la directiva de la industria petrolera. "Tengo el apoyo del pueblo y de la Fuerza Armada bolivariana", agregó.
Investigación a Capriles
Maduro hizo estas declaraciones durante la inauguración de un Centro de Diagnóstico Integral (CDI). Aprovechó este acto para hacer un llamamiento a la paz y a "no caer en provocaciones". "Frente a la intolerancia firmeza y frente al odio amor", ha argumentado. Además criticó que intentaran asaltar la casa de Tibisay Lucena, la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE)."¿Eso es democracia o fascismo? ¿Eso se parece a Hitler o a Cristo Redentor", se preguntó en voz alta el presidente, que insistió en que no estaba exagerando.
En ese contexto, denunció que Capriles está detrás de la muerte de siete personas y en la quema de un centro de atención médica (CDI). Muertos y ataques sobre los que, paradójicamente, la televisión pública no ha ofrecido datos y apenas un par de fotos confusas. Las pruebas exhibidas por el ministro de Interior, Néstor Reverol, se limitaron a tres fotos con jóvenes quemando basura y sólo dio el nombre de dos víctimas.
"Es un plan parecido al que hicieron en Siria y en Libia, quieren llenar el país de múltiples focos de violencia", denunció Maduro en su segunda cadena nacional desde que llegó al poder hace 20 horas. Sin embargo, solo se ha encontrado con grupos de opositores protestando de forma festiva frente a las sedes del Consejo Nacional Electoral a lo largo del todo el país.
El presidente también advirtió luego que podría radicalizar "a fondo" la revolución bolivariana si la oposición continúa agitando la violencia callejera. "Revolución socialista es lo que viene y si siguen con la violencia podemos radicalizar la revolución. Estoy dispuesto a radicalizar, ir a fondo", señaló en una reunión con la directiva de la industria petrolera. "Tengo el apoyo del pueblo y de la Fuerza Armada bolivariana", agregó.
Investigación a Capriles
Precisamente la gran marcha convocada mañana por la oposición frente al CNE, fue prohibida por Maduro que dice que no permitirá actos fascistas. "Si quieren derrocarme, vengan a por mí", contestó. Maduro insinuó que cuenta con el ejército y los cerros (favelas) para defenderlo. "¿Cuántos millones saldrían si llamo a los barrios a la calle... ¿qué pasaría? Pero no lo vamos a hacer. Los gringos quisieran que fuéramos a una guerra pueblo contra pueblo", insistió Maduro en una de sus ya famosas arengas fuera de tono.
Capriles respondió vía twitter llamando a los suyos a protestar frente a los CNEs de todo el país "que nadie caiga en provocaciones, esta lucha es firme pero pacífica. A nosotros nos interesa que reine la paz, al ilegítimo no", dijo en referencia a Maduro.
El presidente de la Asamblea Nacional (AN), Diosdado Cabello, contraatacó con amenazas e insultos y pidió ante el Parlamentoque "se dé inicio a una averiguación penal a Capriles por la violencia generada en el país". Y añadió: "Capriles fascista, me encargaré personalmente que pagues por todo el daño que le estás haciendo a nuestra patria y a nuestro pueblo".
Asimismo, denunció actos de violencia donde "asaltaron y destruyeron los CDI, persiguen a los médicos y queman viviendas" y llamó "irresponsable" a Capriles. Uno de los eficaces peones del chavismo, la fiscal Luis Ortega Díaz, amplió los muertos a siete debido al conflicto postelectoral y denunció que a una de ellas trataron de quemarla viva, aunque sin dar más detalles. "Vamos a incautar los bienes, casas y cuentas de quienes instiguen a la violencia", amenazó y comparó las protestas frente al CNE con lo ocurrido durante el golpe de estado de 2002.
Fuente: elmundo.es
Capriles respondió vía twitter llamando a los suyos a protestar frente a los CNEs de todo el país "que nadie caiga en provocaciones, esta lucha es firme pero pacífica. A nosotros nos interesa que reine la paz, al ilegítimo no", dijo en referencia a Maduro.
El presidente de la Asamblea Nacional (AN), Diosdado Cabello, contraatacó con amenazas e insultos y pidió ante el Parlamentoque "se dé inicio a una averiguación penal a Capriles por la violencia generada en el país". Y añadió: "Capriles fascista, me encargaré personalmente que pagues por todo el daño que le estás haciendo a nuestra patria y a nuestro pueblo".
Asimismo, denunció actos de violencia donde "asaltaron y destruyeron los CDI, persiguen a los médicos y queman viviendas" y llamó "irresponsable" a Capriles. Uno de los eficaces peones del chavismo, la fiscal Luis Ortega Díaz, amplió los muertos a siete debido al conflicto postelectoral y denunció que a una de ellas trataron de quemarla viva, aunque sin dar más detalles. "Vamos a incautar los bienes, casas y cuentas de quienes instiguen a la violencia", amenazó y comparó las protestas frente al CNE con lo ocurrido durante el golpe de estado de 2002.
Fuente: elmundo.es