Brasil firmó un contrato con la fábrica Saab por el cual tendrá acceso a "la tecnología de los aviones suecos, un factor que permitirá construirlos en el país y hacerlo a un precio bajo, lo que nos posibilitará entrar en el mercado latinoamericano y en el africano", según reveló el comandante de la Fuerza Aérea Brasileña, Juniti Saito.
La semana pasada el brigadier Saito y el ministro de Defensa, Celso Amorim, anunciaron que luego de más de una década de analizar propuestas presentadas por fábricas de Suecia, Estados Unidos y Francia, Brasil optó por comprar los Gripen NG.
"La elección se basó en los criterios de desempeño, transferencia de tecnología y coste", afirmó Amorim al anunciar en una rueda de prensa la elección de los aviones de la empresa Saab.
Saito opinó que la compra de este armamento no alterará el equilibrio de fuerzas en Sudamérica porque el avión Gripen NG "no va a asustar (a los vecinos). Es un monomotor que se hará respetar, porque está capacitado para transportar cinco toneladas de bombas y misiles ultramodernos".
Brasil desembolsará 4.500 millones de dólares por los 36 aviones de ataque provenientes del país escandinavo que comenzarán a ser entregados en 2018, de acuerdo con lo señalado por el militar a la edición electrónica del semanario Isto E, que cita la agencia Ansa.
"Hasta que lleguen los nuevos aviones, la empresa Saab podrá entregarnos 12 Gripen que están en operaciones. Además, la empresa ya nos dijo que puede bajar el precio, y de ser así, Brasil podría comprar otros 50", concluyó Saito.
La transferencia de tecnología fue determinante a la hora de elegir los Gripen suecos por sobre los Rafale de la francesa Dassault Aviation, que se presentaban como los favoritos.
Brasil ya vende aviones de combate Super Tucano, fabricados por Embraer, a Chile, Colombia, Ecuador, Guatemala y Perú, además de los Estados Unidos y distintos países africanos. Sin embargo, el desempeño de estos aviones ligeros no es comparable con los poderosos Gripen NG suecos.
El avión es la quinta generación de un modelo que Saab desarrolla desde 1980 y que ya equipa a las fuerzas aéreas de la propia Suecia, de Hungría, la República Checa, Suráfrica y Tailandia, entre otros.
INFOBAE
La semana pasada el brigadier Saito y el ministro de Defensa, Celso Amorim, anunciaron que luego de más de una década de analizar propuestas presentadas por fábricas de Suecia, Estados Unidos y Francia, Brasil optó por comprar los Gripen NG.
"La elección se basó en los criterios de desempeño, transferencia de tecnología y coste", afirmó Amorim al anunciar en una rueda de prensa la elección de los aviones de la empresa Saab.
Saito opinó que la compra de este armamento no alterará el equilibrio de fuerzas en Sudamérica porque el avión Gripen NG "no va a asustar (a los vecinos). Es un monomotor que se hará respetar, porque está capacitado para transportar cinco toneladas de bombas y misiles ultramodernos".
Brasil desembolsará 4.500 millones de dólares por los 36 aviones de ataque provenientes del país escandinavo que comenzarán a ser entregados en 2018, de acuerdo con lo señalado por el militar a la edición electrónica del semanario Isto E, que cita la agencia Ansa.
"Hasta que lleguen los nuevos aviones, la empresa Saab podrá entregarnos 12 Gripen que están en operaciones. Además, la empresa ya nos dijo que puede bajar el precio, y de ser así, Brasil podría comprar otros 50", concluyó Saito.
La transferencia de tecnología fue determinante a la hora de elegir los Gripen suecos por sobre los Rafale de la francesa Dassault Aviation, que se presentaban como los favoritos.
Brasil ya vende aviones de combate Super Tucano, fabricados por Embraer, a Chile, Colombia, Ecuador, Guatemala y Perú, además de los Estados Unidos y distintos países africanos. Sin embargo, el desempeño de estos aviones ligeros no es comparable con los poderosos Gripen NG suecos.
El avión es la quinta generación de un modelo que Saab desarrolla desde 1980 y que ya equipa a las fuerzas aéreas de la propia Suecia, de Hungría, la República Checa, Suráfrica y Tailandia, entre otros.
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