Los servicios Google Maps y Earth eliminaron las nubes de las fotos satelitales, lo que permite nuevas imágenes más claras, y sin nada que obstruya la visualización. Para lograrlo utilizaron imágenes del satélite Landsat 7 de la NASA.
Sus ingenieros analizaron docenas de fotos captadas por el satélite en un mismo punto para elegir la más clara, incluso en regiones tropicales donde normalmente hay lluvias casi todo el año. Tomas había para elegir: cientos de terabytes obtenidos por los satélites USGS y Landsat 7 de la NASA se usaron para el proyecto.
El resultado es una imagen “perfecta” de todo el planeta, con una resolución de 15 metros por píxel. Para darse una idea de la magnitud de la mejora en la definición, vale recordar que en el primer proyecto de la NASA, en 2002, esta era de “tan sólo” mil metros por píxel.
“Nuestras imágenes de satélite se crean normalmente como un edredón, uniendo las de diferentes partes del mundo”, explicó Matt Hancher, del departamento de Tecnología de Google Earth Engine, en un post del blog oficial de la empresa.
Sin embargo, no todo fue tan fácil al principio. El Landsat 7 sufrió un error de hardware cuando comenzó su trabajo, lo que generó rayas en todas las fotos. Igualmente, a través del análisis cuidadoso de las tomas, pudieron ser eliminadas casi todas las rayas.
El nuevo mapa para Google Maps y Google Earth es de 800.000 megapíxeles. Ese número quizás no diga demasiado pero sí el dato de que, para imprimirlo a resolución estándar, se necesitaría un trozo de papel del tamaño de una manzana de una ciudad.
Fuente: radiosantafe.com