La fiscalía del occidental estado de Michoacán, donde se ubica Uruapan, dijo que las víctimas -que fueron colocadas en una glorieta de la transitada vía-, tenían entre 15 y 40 años, estaban maniatadas, presentaban heridas de bala y llevaban unas cartulinas con mensajes.
Las autoridades no difundieron el contenido de los mensajes, como ocurre a menudo para evitar dar publicidad a las acciones del crimen organizado, pero según imágenes de Reuters los textos lanzaban amenazas contra asaltantes y secuestradores del lugar.
Uruapan, a unos 400 kilómetros de la capital, marcó en 2006 el inicio de una lucha frontal del Gobierno contra los cárteles de la droga, después de que pistoleros arrojaran cinco cabezas decapitadas en la pista de baile de un club nocturno.
La zona es dominada por el cártel de los Caballeros Templarios, una escisión de La Familia Michoacana, con el que se disputa el control del tráfico de drogas en la región.
En Ciudad Altamirano, en el estado de Guerrero, policías federales fueron atacados el viernes por la noche por un comando mientras caminaban desarmados en su día libre, dijo a Reuters una fuente oficial que pidió omitir su nombre. Murieron tres agentes y dos civiles.
"Iban caminando al banco y ahí unos tipos de un vehículo les dispararon, entonces ellos corrieron a meterse a un hotel que está a un costado del bar", sostuvo la fuente, desmintiendo versiones de prensa que aseguraban que los policías estaban bebiendo en el bar en su día de descanso.
Desde finales de 2006, más de 70.000 personas han muerto en México por la violencia del narcotráfico y 26000 se encuentran desaparecidas.
Durante los primeros meses de gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, quien asumió el cargo el 1 de diciembre, fallecieron más de 2.200 por enfrentamientos vinculados con la delincuencia organizada, según cifras oficiales.
Fuente Yahoo España
No hay comentarios.:
Publicar un comentario