Fotografía cedida por Presidencia de Argentina del mandatario Mauricio Macri (d) saludando a habitantes antes de pronunciar un discurso frente a la Casa Histórica. |
“Seamos protagonistas, tengamos fe, creamos en nosotros mismos, en nuestra capacidad de crear, de hacer y desarrollar”, dijo Macri, al hablar junto al Museo Casa Histórica de la Independencia, el sitio donde se firmó la declaración que en 1816 materializó la separación, de la corona española, de las entonces Provincias Unidas del Río de la Plata.
“Somos nosotros los que tenemos que elegir nuestros proyectos, impulsarlos, defenderlos”, añadió el jefe de Estado, en un tono similar al discurso pronunciado este viernes en la provincia de Jujuy, en la que dio inicio a los festejos oficiales por el Bicentenario.
En la Casa Histórica, Macri firmó un acta de compromiso “para el tercer siglo de Argentina”, acompañado de los gobernadores y representantes de los 24 distritos del país y la vicepresidenta Gabriela Michetti.
“Acá es donde un conjunto de ciudadanos se animaron a soñar”, recordó Macri.
“Deberían tener angustia de tomar la decisión, querido rey, de separarse de España, porque nunca es fácil asumir ser independientes”, consideró el mandatario argentino, dirigiéndose a Juan Carlos I, presente en el acto y que encabezó la representación española que asistió a las celebraciones de hoy.
Allí también estuvieron figuras internacionales como los vicepresidentes de Bolivia, Álvaro García Linera, y de Uruguay, Raúl Sendic, y el presidente de la Corte Suprema de Chile, Hugo Dolmestch.
Juan Carlos I mantuvo una reunión con el presidente de la República, Mauricio Macri, en la que Argentina y España constataron el buen estado de sus nuevas relaciones bilaterales y expresaron el deseo común de potenciarlas, informaron a Efe fuentes oficiales.
En el transcurso de este encuentro, que duró veinte minutos, don Juan Carlos entregó a Mauricio Macri una carta de su hijo, el rey Felipe VI, reiterando la invitación para que visite España.
Terminada la reunión, y a la salida del recinto del Museo Casa Histórica de la Independencia, el Rey Juan Carlos recibió numerosas muestras de simpatía hacia España de los centenares de personas que esperaban en el lugar para ver a las autoridades.
También aprovechó su visita a Tucumán para reunirse, a primera hora de la mañana, con unas treinta personas que representaron a colectivos españoles de la provincia, en la que hay están censados unos 13.000 ciudadanos del país europeo.
Además se esa una nueva jura de la independencia para el “tercer siglo”, el izado de la bandera celeste y blanca, un solemne tedéum y un desfile cívico-militar constituyeron los principales actos oficiales, que se celebraron en un ambiente festivo, en el que reinó la convivencia ciudadana y estuvo exento de incidentes.
Mauricio Macri comenzó temprano su jornada, saludando en el Salón Blanco de la Gobernación a los gobernadores, integrantes de su Gabinete y altas autoridades extranjeras que llegaron a San Miguel de Tucumán para sumarse a la celebración.
También presidió el izado de la bandera, celebrado en la plaza Independencia, a las puertas de la Gobernación provincial y en el centro de la capital tucumana.
Familias enteras y centenares de alumnos de escuelas locales celebraron la conmemoración en el centro de San Miguel de Tucumán al grito de “Argentina, Argentina”.
Las autoridades nacionales e internacionales también participaron del solemne tedéum, una ceremonia interreligiosa celebrada en la catedral de la capital provincial y encabezado por el arzobispo de Tucumán, Alfredo Zecca.
Esta ceremonia de acción de gracias contó con la participación activa de representantes de otras religiones presentes en Argentina: la ortodoxa, la evangélica, la judía y la musulmana.
Un colorido desfile, en el que participaron miembros de las fuerzas armadas, agrupaciones gauchas, colectividades y escuelas, entre otros representantes del país, completó el repertorio de actos centrales en Tucumán.
Las celebraciones continuarán en el resto del país: este domingo, en la ciudad de Buenos Aires se realizará un desfile de bandas militares nacionales y otros 11 países por la Avenida del Libertador, una de las principales vías de la capital argentina.
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