Teri Rowles, coordinadora del Programa de Salud y Respuesta a Varamientos de Mamíferos Marinos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, declaró en rueda de prensa que no hay nada que se pueda hacer para detener el virus.
Según los especialistas existen vacunas contra los morbillivirus que atacan animales terrestres, pero no se pueden aplicar fácilmente a poblaciones de delfines.
Desde principios de julio, más de 300 delfines se encontraron muertos en las playas ubicadas entre Nueva York y Carolina del Norte.
El último evento similar, causado por el mismo virus, ocurrió entre 1987 y 1988 cuando murieron 740 delfines entre Nueva Jersey y Florida.
Los científicos consideran que en esta ocasión la experiencia pudiera ser peor. Asimismo, plantean que la epidemia puede extenderse hacia el sur y durar hasta la primavera de 2014.
Por otro lado, los expertos opinan que no hay indicios de que pueda afectar a las personas dada la distancia que hay entre las especies de mamíferos marinos y humanos.
Esta afección, similar al sarampión en los humanos, afecta a los pulmones y el cerebro, causando neumonía, comportamiento anormal y a menudo es letal.
Virus de la misma familia del morbillivirus cetáceo provocan también el moquillo en los perros y los lobos, así como la peste bovina en el ganado.
Fuente: prensa latina
No hay comentarios.:
Publicar un comentario