La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, anunció la eliminación de los impuestos cobrados a los productos de la canasta básica de alimentos con el fin de contener la inflación oficial que acumula en lo que va del año una tasa anual de 1,47 por ciento, por encima del 1,01 por ciento registrado en igual periodo de 2012.
Según información publicada por medios brasileños, la renuncia fiscal, realizada mediante decreto presidencial y anunciada a través de cadena nacional de televisión que duró 11 minutos, llevará a que al Tesoro Nacional deje de recaudar dos mil 750 millones de dólares.Ante la amenaza de que la inflación continúe la curva ascendente iniciada en 2012 y en respuesta a las críticas que en ese sentido el gobierno del Partido de los Trabajadores (PT) viene recibiendo por parte de la oposición, Rousseff defendió con firmeza su política económica.
La mandataria afirmó que gobierna el país "con la misma responsabilidad que usted (refiriéndose al televidente) y su marido gobiernan su casa" y "no descuido ni por un sólo momento el control de la inflación".
"La estabilidad de la economía es fundamental para todos nosotros. Y es por eso que no dejo de buscar siempre nuevas formas de abaratar el costo de vida de los brasileños y de proteger su poder de consumo y sus derechos de consumidor", resaltó.
Explicó que el gobierno reformuló la canasta básica incluyendo productos de higiene personal, limpieza y artículos que calificó como "de mayor valor nutritivo".
Entre los productos exonerados de impuestos federales se incluyen todas las carnes -bovina, porcina, de ave y pescado-, café, aceite, manteca, azúcar, papel higiénico, pasta dental y jabón de tocador, entre otros.
Otros alimentos que conforman la dieta básica de los brasileños, como leche, frijoles, arroz, harina de trigo, pastas, patatas, legumbres, pan y frutas, ya habían sido exonerados de la tributación.
En su breve discurso, Rousseff instó además a las empresas a bajar los precios de todos los productos incluidos en la canasta.
Para llevar a acabo la propuesta, el ministro de Hacienda, Guido Mantega, se reunirá el lunes con los dueños de supermercados y empresarios de la industria de alimentos para exhortarlos a que transfieran en forma inmediata a los productos, el recorte tributario anunciado.
"Cuento con los empresarios para que este anuncio signifique una reducción de por los menos 9,25 por ciento en el precio de las carnes, el café, la manteca, el aceite, y de 12,5 por ciento en pastas de dientes y jabones sólo para citar algunos ejemplos", subrayó la mandataria.
La inflación continúa siendo la principal preocupación del gobierno, junto con la magra expansión económica del Producto Interno Bruto (PIB), por lo que el Banco Central llegó a manejar la posibilidad de volver a subir este año la tasa básica de interés, que en 2012 fue reducida en forma gradual y constante y alcanzó un mínimo histórico de 7,25 por ciento.
El gobierno estima que la renuncia fiscal anunciada reducirá la inflación en 0,60 puntos porcentuales, siempre que los empresarios adhieran a la propuesta.
Fuente: teleSUR- La Tercera
Según información publicada por medios brasileños, la renuncia fiscal, realizada mediante decreto presidencial y anunciada a través de cadena nacional de televisión que duró 11 minutos, llevará a que al Tesoro Nacional deje de recaudar dos mil 750 millones de dólares.Ante la amenaza de que la inflación continúe la curva ascendente iniciada en 2012 y en respuesta a las críticas que en ese sentido el gobierno del Partido de los Trabajadores (PT) viene recibiendo por parte de la oposición, Rousseff defendió con firmeza su política económica.
La mandataria afirmó que gobierna el país "con la misma responsabilidad que usted (refiriéndose al televidente) y su marido gobiernan su casa" y "no descuido ni por un sólo momento el control de la inflación".
"La estabilidad de la economía es fundamental para todos nosotros. Y es por eso que no dejo de buscar siempre nuevas formas de abaratar el costo de vida de los brasileños y de proteger su poder de consumo y sus derechos de consumidor", resaltó.
Explicó que el gobierno reformuló la canasta básica incluyendo productos de higiene personal, limpieza y artículos que calificó como "de mayor valor nutritivo".
Entre los productos exonerados de impuestos federales se incluyen todas las carnes -bovina, porcina, de ave y pescado-, café, aceite, manteca, azúcar, papel higiénico, pasta dental y jabón de tocador, entre otros.
Otros alimentos que conforman la dieta básica de los brasileños, como leche, frijoles, arroz, harina de trigo, pastas, patatas, legumbres, pan y frutas, ya habían sido exonerados de la tributación.
En su breve discurso, Rousseff instó además a las empresas a bajar los precios de todos los productos incluidos en la canasta.
Para llevar a acabo la propuesta, el ministro de Hacienda, Guido Mantega, se reunirá el lunes con los dueños de supermercados y empresarios de la industria de alimentos para exhortarlos a que transfieran en forma inmediata a los productos, el recorte tributario anunciado.
"Cuento con los empresarios para que este anuncio signifique una reducción de por los menos 9,25 por ciento en el precio de las carnes, el café, la manteca, el aceite, y de 12,5 por ciento en pastas de dientes y jabones sólo para citar algunos ejemplos", subrayó la mandataria.
La inflación continúa siendo la principal preocupación del gobierno, junto con la magra expansión económica del Producto Interno Bruto (PIB), por lo que el Banco Central llegó a manejar la posibilidad de volver a subir este año la tasa básica de interés, que en 2012 fue reducida en forma gradual y constante y alcanzó un mínimo histórico de 7,25 por ciento.
El gobierno estima que la renuncia fiscal anunciada reducirá la inflación en 0,60 puntos porcentuales, siempre que los empresarios adhieran a la propuesta.
Fuente: teleSUR- La Tercera
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