Soldados surcoreanos. / EFE
Los hechos ocurrieron sobre las 20.15 horas locales (11.15 GMT), cuando un sargento del Ejército surcoreano abrió fuego de forma indiscriminada en el puesto ubicado en la localidad de Goseng, en la provincia de Gangwon, próximo a la Zona Desmilitarizada (DMZ) entre las dos Coreas, según dijeron fuentes militares a la agencia local Yonhap.
El sospechoso, cuya identidad no ha sido revelada, fue capturado después de realizar disparos aleatorios sobre sus compañeros, añadieron los mismas fuentes, que descartaron que el incidente esté relacionado con el conflicto con Corea del Norte.
Cinco de los soldados alcanzados fallecieron poco después de los disparos, mientras que los otros cinco heridos fueron trasladados a un hospital cercano.
El Ministerio de Defensa surcoreano está investigando actualmente el suceso, del que no ha revelado más detalles.
El incidente recuerda a otro acaecido en 2005 en una unidad militar de la frontera con Corea del Norte, cuando un soldado surcoreano mató a ocho de sus compañeros al lanzar una granada de mano en el barracón donde dormían y ametrallarlos después con su fusil de asalto.
El soldado Kim Dong-min, de 22 años, fue condenado a muerte tras reconocer que había actuado de esa forma en un ataque de ira por los abusos verbales de los que era objeto en la compañía en que servía.
Abc
El sospechoso, cuya identidad no ha sido revelada, fue capturado después de realizar disparos aleatorios sobre sus compañeros, añadieron los mismas fuentes, que descartaron que el incidente esté relacionado con el conflicto con Corea del Norte.
Cinco de los soldados alcanzados fallecieron poco después de los disparos, mientras que los otros cinco heridos fueron trasladados a un hospital cercano.
El Ministerio de Defensa surcoreano está investigando actualmente el suceso, del que no ha revelado más detalles.
El incidente recuerda a otro acaecido en 2005 en una unidad militar de la frontera con Corea del Norte, cuando un soldado surcoreano mató a ocho de sus compañeros al lanzar una granada de mano en el barracón donde dormían y ametrallarlos después con su fusil de asalto.
El soldado Kim Dong-min, de 22 años, fue condenado a muerte tras reconocer que había actuado de esa forma en un ataque de ira por los abusos verbales de los que era objeto en la compañía en que servía.
Abc
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