Es evidente que la OTAN entrena a sus militares para un eventual conflicto con Moscú, denuncia el viceministro ruso de Defensa, Anatoli Antónov. La Alianza sigue con el "desarrollo ilimitado" del sistema de defensa antiaérea en Europa, subrayó el militar, y advirtió que Rusia tendrá que tomar medidas en respuesta.
"En una situación en la que se está desarrollando sin límites la defensa antiaérea capaz de interceptar los misiles balísticos intercontinentales rusos habrá que tomar medidas de respuesta, como ya hemos subrayado en numerosas ocasiones", ha declarado Antónov, según recoge la agencia de noticias RIA Novosti.
Al mismo tiempo, el viceministro ruso precisó que la OTAN ha cerrado el diálogo militar y político con Moscú, incluido el tema del escudo antimisiles. "Esto le permite a la Alianza actuar sin explicar sus motivos y sin reaccionar a la preocupación rusa. Con todo eso, no ha presentado ningún contraargumento al Ministerio de Defensa de Rusia, que considera 'antirruso' el potencial del sistema europeo de defensa antiaérea", acentuó.
La OTAN siempre ha argumentado que su escudo antimisiles servirá para protegerse ante un eventual ataque de Irán. Sin embargo, hoy en día el acuerdo nuclear con la república islámica está prácticamente finalizado, subrayó Antónov, en cuya opinión es obvio que, entre otras cosas, las maniobras militares de la OTAN en su mayoría están dirigidas contra Rusia, incluidas las que tendrán lugar en octubre de este año.
"Los ejercicios se realizarán en la parte nororiental del Atlántico. Eso prueba solo una cosa: se tratará de entrenar cómo interceptar los misiles balísticos rusos. Entrenamientos de este tipo no pueden no preocuparnos", destacó Antónov.
Al mismo tiempo, el viceministro ruso precisó que la OTAN ha cerrado el diálogo militar y político con Moscú, incluido el tema del escudo antimisiles. "Esto le permite a la Alianza actuar sin explicar sus motivos y sin reaccionar a la preocupación rusa. Con todo eso, no ha presentado ningún contraargumento al Ministerio de Defensa de Rusia, que considera 'antirruso' el potencial del sistema europeo de defensa antiaérea", acentuó.
La OTAN siempre ha argumentado que su escudo antimisiles servirá para protegerse ante un eventual ataque de Irán. Sin embargo, hoy en día el acuerdo nuclear con la república islámica está prácticamente finalizado, subrayó Antónov, en cuya opinión es obvio que, entre otras cosas, las maniobras militares de la OTAN en su mayoría están dirigidas contra Rusia, incluidas las que tendrán lugar en octubre de este año.
"Los ejercicios se realizarán en la parte nororiental del Atlántico. Eso prueba solo una cosa: se tratará de entrenar cómo interceptar los misiles balísticos rusos. Entrenamientos de este tipo no pueden no preocuparnos", destacó Antónov.
RT
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